Sistema de gobierno mixto

Los sistemas gubernamentales mixtos son aquellos que combinan elementos propios de la Democracia, la Monocracia y la Oligarquía, con proporciones diferentes de estos elementos, y poniéndose estas formas ya mencionadas. La doctrina acepta las siguientes formas de gobierno mixto, algunas de carácter histórico, otras más bien recientes o actuales.

República Romana[editar]

El gobierno es mixto porque al enfocarnos en los cónsules, el régimen es monárquico; al tomar en cuenta al Senado, es aristocrático; al mirar los Comicios, es democrático. Este sistema constitucional engendra un armonioso equilibrio que asegura a la vez la fuerza del Estado y la dignidad de vida de los ciudadanos".

Sin embargo este sistema solo tiene las apariencias de una igualdad republicana, en efecto, el gobierno está en manos de la nobleza senatorial que se configura cada vez más en una oligarquía más cerrada y exclusiva.

Monarquía limitada[editar]

En este régimen se combina el principio monocrático del gobierno del monarca con participación en el poder de una aristocracia nobiliaria y hereditaria que forma la Cámara Alta, y una Plutocracia censitaria que designa la Cámara Baja, y tenida por representante de la nación entera.

Se trata de un sistema intermedio entre la Monarquía Absoluta y el Parlamentarismo dualista. Este fue el sistema adoptado en la Gran Bretaña de 1689.

La totalidad del poder de gobierno pertenece al monarca, y el poder legislativo pertenece al Parlamento bajo reserva del poder reglamentario que posee el monarca. Este monarca, gobierna solo o con sus ministros, que solo son responsables ante él, pero no ante el Parlamento. En cambio, una o las dos cámaras pueden ser disueltas por el monarca, pero normalmente solo la cámara elegida puede serlo, pues la otra, según el esquema histórico puede ser obligada por la sola amenaza de nombramiento efectivo de una hornada de pares nuevos y dóciles. Este derecho de disolución incondicional de la cámara elegida, la más importante, desequilibra la balanza del poder a favor del monarca, irresponsable e inamovible, quien, por otra parte, posee también el derecho de Veto legislativo, aunque en Gran Bretaña este veto ha jugado muy poco prácticamente, pues no fue utilizado más después de 1707.

Parlamentarismo dualista[editar]

Deriva de la monarquía limitada, conservando el monarca su status de Jefe de Estado y manteniéndose las cámaras, aristocrática y censitaria, con algunas atenuaciones. El sistema es dualista porque existe una doble responsabilidad ministerial, pues el rey puede revocar a los ministros y disolver la cámara que les otorgue confianza. Por otro lado, la Cámara Alta le da su apoyo, pues le es adherente por tradición y por necesidad, pues los pares designados permiten modificar su composición.

Este sistema fue aplicado en Italia a fines del siglo XIX y comienzos del siglo XX.

Monarquía Parlamentaria[editar]

En esta forma de gobierno se combina el principio monocrático, el oligárquico en su variante aristocrática y el gobierno democrático, pero predominando siempre este último.

Este es el gobierno que tiene aplicación en la actual Inglaterra, en donde el rey es el Jefe de Estado (principio monocrático) y la Cámara de los Lores, está compuesta por la aristocracia (principio oligárquico). La Cámara de los Comunes expresa el principio democrático al ser elegida por sufragio universal y popular, a la vez que puede censurar al Gabinete. El parlamentarismo es monista, puesto que el Gabinete solo es responsable políticamente ante la Cámara de los Comunes.

Cesarismo democrático[editar]

En esta forma de gobierno, el elemento monocrático se combina con el elemento democrático. El cesarismo es monocrático, en tanto que en el Jefe de Estado (César) o en un solo hombre, se concentra el poder que entraña como consecuencia una suspensión o restricción de ciertas libertades personales.

Pero es democrático, porque la autoridad o poder de este César; lo ejerce a nombre del pueblo, presentándose como plebiscitado o elegido por el pueblo, recurriendo al Plebiscito, de donde obtiene manifestación popular de confianza.

Verbigracia: El de Napoleón Bonaparte, pero en que el principio cesarista terminará por prevalecer, al proclamarse Emperador.

Bibliografía[editar]

  • Instituciones Políticas, Hernán Molina Guaita (Fondo de Publicaciones de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad de Concepción)