Inversión extranjera directa

La inversión extranjera directa es la adquisición de empresas o activos en el extranjero como inversión a largo plazo. En inglés el término es Foreign Direct Investment o FDI.

La Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo la define como “Una inversión realizada para adquirir una participación duradera en una empresa que opera fuera de la economía del inversor” [1]​ y que en términos generales se acepta que ocurre cuando se posee al menos un 10% del capital de la empresa extranjera[2]​.

Constituye una clasificación estadística de flujos transfronterizos dentro de la balanza de pagos. De acuerdo con el Manual de Balanza de Pagos y Posición de Inversión Internacional, sexta edición, del FMI, se define como:

La inversión directa es una categoría de la inversión transfronteriza relacionada con el hecho de que un inversionista residente en una economía ejerce el control o un grado significativo de influencia sobre la gestión de una empresa que es residente en otra economía.[3]

Determinantes[editar]

Existen diversos factores que afectan a que una empresa decida invertir en otro país y la importancia de los mismos depende, entre otras cosas, del grado de desarrollo de la economía receptora[4]​. Por ejemplo, en países con menor desarrollo una de las causas para invertir podría ser la mano de obra más barata, mientras que en países muy desarrollados podría tener más importancia su nivel de investigación e innovación[5]​. Casi todos los argumentos que se han ofrecido para la existencia de IED pueden agruparse bajo tres objetivos básicos: el intento de participar en nuevos mercados, aumentar la eficiencia productiva a través de reducciones de costos y el intento de explotación de ciertos activos estratégicos.[6]

Explotación de nuevos mercados[editar]

Una de las principales razones que se han ofrecido para las diversas formas de explicar la presencia de IED en una economía es la búsqueda de nuevos mercados. Tradicionalmente, se suponía que una empresa que proveía a una economía grande y/o rica podía asegurarse su participación en dicho mercado mediante una inversión directa. En ese sentido, la IED tradicionalmente se entendía como un sustituto directo del comercio. Por ende, un factor explicativo de este tipo de IED es el tamaño del mercado de destino, el cual puede medirse mediante el ingreso total de una economía o mediante sus dos componentes: el tamaño de la población y el ingreso por capital. De hecho, una parte de la explicación en las décadas de los sesenta y setenta estaba basada en el fuerte proteccionismo que caracterizaba a algunas economías. Esto se debía a que en un mercado protegido era más atractivo el invertir en forma directa que utilizar la vía alternativa (exportar), la cual podría ser muy costosa. Además, una economía protegida ofrecía un atractivo mercado cautivo. Este tipo de IED se conoce en inglés con el nombre de tariff-jumping.

Un enfoque más moderno, sin embargo, sugiere que existe un cierto tipo de IED que busca un mercado más grande pero no en forma directa sino indirecta. En este sentido, una economía que ofrece ventajas comerciales o de localización geográfica, podría servir para atraer a la IED que busca penetrar en un mercado más amplio (por ejemplo, en un tercer país, lo cual puede ser el resultado del establecimiento de acuerdos comerciales). En este sentido, este tipo de IED podría estar asociado a un mayor volumen de comercio internacional y no a uno menor como se suponía anteriormente.

Además, este tipo de IED sería más común en aquellos países que ofrecieran un cierto tipo de ventajas ya sea comerciales (acceso a terceros países mediante acuerdos comerciales) o de localización geográfica (mediante menores costos). Un ejemplo de esto, es el caso de México que ofrece a terceros países la posibilidad de acceder al mercado estadounidense como resultado de su participación en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte.

l es abundante y los salarios son relativamente bajos. Sin embargo, también es el caso de la IED que busca una mayor eficiencia por costo unitario de la fuerza laboral. Esto implica que hay cierto tipo de IED que no solo busca mano de obra barata sino una combinación de salarios inferiores a los domésticos y una alta productividad de los trabajadores.

Búsqueda de activos estratégicos[editar]

Este tipo de IED puede dividirse en dos situaciones completamente extremas. Por una parte, se encuentra la IED que busca explotar la existencia de ciertos recursos naturales. Este es la forma más tradicional y antigua de IED. Sin embargo, en la actualidad este tipo de IED ha ido perdiendo importancia en el mundo, en parte porque la dotación de factores es relativamente fija pero también como resultado del surgimiento de muchos otros bienes que pueden sustituir a este tipo de recursos.

Otros determinantes de la inversión extranjera directa.[editar]

Los factores que hemos mencionado anteriormente sugieren una serie de posibles determinantes de la IED: el tamaño del mercado, las características de la fuerza laboral, la ubicación geográfica, la dotación de factores, etc. Sin embargo, estos determinantes son válidos en un contexto puramente abstracto en donde los aspectos institucionales son irrelevantes o idénticos en todas las economías. Por supuesto, esto no es cierto y en la práctica existen una serie de factores institucionales y de política que sin duda desempeñan un papel importante en la determinación de los flujos de IED. Este otro tipo de factores pueden ser manejados mediante políticas gubernamentales y pueden convertirse en instrumentos de atracción o repulsión de la IED. Para propósitos de este estudio, distinguiremos entre dos tipos de factores: factores institucionales o estructurales y políticas de incentivos.

La inversión extranjera directa vs FBKF[editar]

Conviene anotar que la inversión extranjera directa es una categoría estadística que hace referencia al control o influencia de un inversionista extranjero sobre activos domésticos, por tanto, un aumento de la inversión extranjera directa no necesariamente implica un aumento del acervo de capital productivo (que es la inversión real de una economía, normalmente representada por la formación bruta de capital fijo en cuentas nacionales). De hecho, un aumento de la inversión extranjera sólo por transferencia de dominio (un activo doméstico es vendido a un inversionista residente en el extranjero) no implica variación alguna en el total de activos productivos de la economía que recibió esta inversión.

Esta distinción no es superflua.

Inversión fantasma en cascarones corporativos sin sustancia y sin encadenamientos reales a la economía local puede llegar a contabilizar el 40% de la IED global.[7]

Véase también[editar]

Referencias[editar]

  1. Moyo (Dambisa). «7. Los Chinos son nuestros amigos». Cuando la ayuda es el problema: hay otro camino para Africa. Madrid: Gota a Gota. p. 164. ISBN 9788497261 |isbn= incorrecto (ayuda). 
  2. Ramírez Alesón, M; Fleta-Asín, J. Tipologías de los inversores europeos (UE15) en España = Types of european investors (EU15) in Spain. OCLC 1293677332. Consultado el 23 de abril de 2023. 
  3. FMI, Manual de Balanza de Pagos y Posición de Inversión Internacional, sexta edición, p. 126, disponible en: http://www.imf.org/~/media/websites/imf/imported-publications-loe-pdfs/external/spanish/pubs/ft/bop/2007/bopman6s.ashx
  4. Ramírez-Alesón, Marisa; Fleta-Asín, Jorge (1 de marzo de 2016). «Is the Importance of Location Factors Different Depending on the Degree of Development of the Country?». Journal of International Management (en inglés) 22 (1): 29-43. ISSN 1075-4253. doi:10.1016/j.intman.2015.10.002. Consultado el 23 de abril de 2023. 
  5. Universidad de Zaragoza, Jorge; Ramírez Alesón, María Luisa (2012). Factores de localización de la inversión extranjera directa: Importancia e influencia en el comportamiento inversor de las empresas europeas en España. Tesis de la Universidad de Zaragoza. Universidad de Zaragoza, Prensas de la Universidad. ISBN 978-84-697-0808-8. Consultado el 23 de abril de 2023. 
  6. [1]
  7. Damgard, Jannick; Elkjaer, Thomas (11 de diciembre de 2019). «What Is Real and What Is Not in the Global FDI Network?». International Monetary Fund Working Papers (en inglés). Consultado el 2 de abril de 2024. 

Enlaces externos[editar]