Hipónimo

En semántica lingüística, se denomina hipónimo a la palabra que posee todos los rasgos semánticos, o semas, de otra más general -su hiperónimo- pero que en su definición añade otras características semánticas que la diferencian de ésta (del hiperónimo).[1]​ Por ejemplo, los hipónimos de día son: lunes, martes, miércoles, etc. Es decir, son palabras que poseen todos los rasgos semánticos y añaden otras características para diferenciarlas de esta.

Etimología[editar]

El término deriva del griego υπονύμιον, compuesto por la preposición ὑπό (hipó): bajo, debajo, y del sustantivo ὄνομα (noma): nombre, que se le da a la disciplina filológica que estudia el origen de las palabras y la evolución de su forma y significado es algo muy importante para las personas.

Ejemplos[editar]

Descapotable (o convertible) es hipónimo de coche (el hiperónimo), ya que comparte todos los rasgos mínimos de este medio de transporte; a saber: vehículo + con motor + pequeño tamaño, etcétera, pero a estos atributos agrega la cualidad de capota abatible.

Otros ejemplos:

  • Hiperónimos:

a) días (de la semana); b) muebles; c) frutas; d) árboles.

  • Hipónimos:

a) mañana, lunes, etc.; b) escritorios, mesas, sillas, etc.; c) manzanas, peras, plátanos,etc. d) cedro, pino, roble, etc.

En el mundo de las tecnologías de información, el símil se podría encontrar en la orientación a objetos, donde el hipónimo es una clase (u objeto, según sea el caso); el hiperónimo, la superclase.

Palabras relacionadas[editar]

Referencias[editar]

  1. Ríos Ríos, Aura Josefina; Bolívar, Constanza Ivet (2009). Razonamiento verbal y pensamiento analógico. Universidad del Rosario. ISBN 978-95-8738-083-5.