Chucho el Roto

Chucho el Roto
Información personal
Nombre de nacimiento Jesús Arriaga Ver y modificar los datos en Wikidata
Nacimiento 1858 Ver y modificar los datos en Wikidata
Chiautempan, Tlaxcala
Fallecimiento 25 de marzo de 1884 Ver y modificar los datos en Wikidata
Veracruz (México) Ver y modificar los datos en Wikidata
Nacionalidad Mexicana
Información profesional
Ocupación Criminal Ver y modificar los datos en Wikidata
Seudónimo Chucho el Roto Ver y modificar los datos en Wikidata

Jesús Arriaga, conocido por el sobrenombre “Chucho el Roto” (Chiautempan, Tlaxcala, 1858 - Veracruz, 25 de marzo de 1894), fue un bandido mexicano.

Se convirtió en astuto bandido e inmejorable estafador al no encontrar otro camino para vengarse de un millonario que lo mandó a presidio. Se había evadido del penal de San Juan de Ulúa, una de las cárceles más temidas del porfiriato, en 1885. El penal estaba en el islote del mismo nombre, frente a la ciudad y puerto de Veracruz.[cita requerida]

Biografía[editar]

La doctora e historiadora Sofía Valencia lo señala como nacido en Chiautempan hacia 1858, del linaje del presbítero y bachiller don Pedro de Arriaga, quien ciertamente fungió como cura párroco de esta ciudad entre 1836 y 1850. Esto lo llevó a radicar aquí por muchos años con su familia, habiéndose casado en esta ciudad una de sus hermanas que, según estas referencias, más tarde fue la madre de nuestro referido. Se ha agregado, además, que su nacimiento se dio en el barrio de la Cuenda, que se ubicó sobre la calle del Gallito, hoy conocida como Manuel Saldaña Norte, o bien en casas contiguas a esta.[cita requerida]

Se asegura que su cautiverio se debió a la venganza de don Diego del Frizac, un millonario de origen francés, tío de una agraciada joven noble que se enamoró de Jesús, quien era en ese entonces un pobre y honrado carpintero. Matilde del Frizac y él procrearon una hermosa niña, a quien pusieron por nombre María de los Dolores (Lolita).[cita requerida]

Al descubrirse el hecho, Jesús fue humillado y amenazado por los parientes de la muchacha, y finalmente rechazado por esta, por temor a su tío. Entonces Chucho decidió robarse a su hija, y este fue el motivo para encarcelarlo, aun a pesar de haber devuelto a la criatura, primero en la penitenciaria de la Ciudad de México (cárcel llamada Los Arcos de Belén), de donde fue trasladado finalmente a San Juan de Ulúa, una de las cárceles más temibles del porfiriato.

Las estafas de Jesús Arriaga llegaron a ser famosas y a sorprender a mexicanos y extranjeros, por ser un astuto e inteligente ladrón quien, sin embargo, usaba la mayor parte de lo robado para socorrer a los necesitados. Las autoridades del porfiriato no podían aprehenderlos a él y a su banda, a pesar de realizar sus atracos en la Ciudad de México.[cita requerida]

Era conocido con el sobrenombre de “Chucho el Roto” porque para llevar a cabo sus estafas acostumbraba vestir con suma elegancia, al estilo de los adinerados de esos tiempos, en pleno porfiriato, los llamados rotos (elegantes o catrines). A lo largo de casi diez años y en compañía de sus secuaces, apodados “La Changa”, “El Rorro”, “Juan Palomo” y “Lebrija”, robó y estafó, pero asimismo luchó en favor de los desposeídos, convirtiéndose en uno de los ídolos más queridos del pueblo, ya que robaba a los ricos para ayudar a los pobres.[cita requerida]

A todo esto se agrega la versión de Ricardo Alva, escritor oriundo de Apizaco, quien relata de manera un tanto novelada que el propio Jesús Arriaga en una ocasión afirmó ser oriundo de Chiautempan, que visitó muchas veces en compañía de sus amigos, y que, si alguna vez había asegurado ser de otro estado, lo había hecho como una estrategia para evitar que se les causara daño a su madre y sus hermanas. Cuentan varios vecinos que lo llegaron a ver en un carruaje siempre cerca de las colonias Tacuba, Popotla, Tlaxpana y Anáhuac, saludando siempre con la cortesía que se le daba.[cita requerida]

Años después, fue apresado en las Cumbres de Maltrata, estado de Veracruz, en el que se supone fue su último atraco. Se asegura fue conducido nuevamente al penal de San Juan de Ulúa, mismo de donde había escapado nueve años atrás, introduciéndose en una cuba (barril que hacía las veces de un sanitario). Se comenta que cuando nuevamente intentó escapar, fue traicionado por un compañero de celda apodado “Bruno".[cita requerida]

Herido de bala, fue recapturado, y al pasar por la plaza principal de la fortaleza, el coronel Federico Hinojosa, director del penal ordenó:

-¡Que le den doscientos latigazos a ese desgraciado!

Con mucho orgullo, “Chucho el Roto” contestó:

-No puede ser desgraciado el que roba para aliviar el infortunio de los desventurados.

El director dijo: -¡Denle trescientos!

Entonces fue trasladado a una celda de castigo conocida como El Limbo en el mismo penal, en donde un verdugo apodado “El Boa” cumplió la orden. Para ello, se dice, el verdugo recibió previamente mil doscientos pesos-oro de manos de Matilde del Frizac, la madre de Lolita, con el fin de evitar que Jesús muriera en el acto, pues el verdugo sabía cómo golpear.

Del Limbo lo llevaron a la enfermería del hospital más antiguo de Veracruz, el “San Sebastián”, donde oficialmente murió el 25 de marzo de 1894, a los treinta y seis años de edad. El cuerpo fue recibido por Matilde de Frizac, Lupe, hermana de Jesús, y Lolita, su hija. El féretro fue custodiado por guardias contratados por Matilde y trasladado por ferrocarril a la Ciudad de México para que se le diera cristiana sepultura. Las tres mujeres, acompañadas por un marqués austriaco, de nombre desconocido y prometido de Matilde de Frizac, abordaron un vapor que las llevaría a Europa.[cita requerida]

En cuanto a los restos de Jesús Arriaga, cuentan que cuando abrieron el féretro en la capital este estaba lleno de piedras, así que no se pudo saber más de él.[cita requerida]

Sin embargo, en la Ciudad de México, en el Panteón del Tepeyac, en la Villa de Guadalupe, se encuentra la tumba de la que fuera su hija Lolita, cuyo nombre completo fue Dolores Arriaga del Frizac.[cita requerida]

Otros datos[editar]

  • La fortaleza de San Juan de Ulúa es un baluarte construido en la época colonial frente al puerto de Veracruz; sirvió como defensa ante la piratería (siendo la más recordada la realizada por Laurens de Graaf, alias “Lorencillo”, el 17 de mayo de 1683), aduana para mercaderías de ultramar, último reducto peninsular previo al reconocimiento de independencia de los territorios americanos por la corona española, oficina y residencia del poder ejecutivo mexicano durante la guerra de intervención y finalmente presidio de máxima seguridad, junto con el baluarte de Pinotepa Nacional, Oaxaca, durante el porfiriato.
  • Siempre ha existido la versión, que ha pasado de generación a generación, de los escapes de “Chucho el Roto”. La forma como se fugó de los presidios y celdas en donde fue recluido, tanto de la cárcel de Arcos de Belén en la Ciudad de México, como de San Juan de Ulúa en el puerto de Veracruz.
  • Los guías de turistas que trabajan en la fortaleza de San Juan de Ulúa, dado que hoy es un museo, dan varias versiones de su destino final:
  • La primera narra el escape al mar, infestado de tiburones, para posteriormente reunirse con Matilde de Frizac, huyendo a Europa y estableciéndose en Francia.
  • Otra más afirma que murió en el hospital, después de recibir trescientos latigazos al ser aprehendido en su última fuga. Con base en esta versión, su cuerpo fue trasladado a la ciudad de México para ser sepultado. Pero cuando abrieron el ataúd no estaba el cadáver, tan solo piedras. Este ha sido el último misterio de Jesús Arriaga, “Chucho el Roto”.
  • Es probable que el origen de la leyenda sea una novela anónima, muy popular, publicada en 1888 con el título de “Chucho el Roto o la Nobleza de un Bandido Generoso”.
  • Entre las décadas de 1960 y 1970, por más de once años, se transmitieron a través de la emisora XEW, La Voz de la América latina desde México, los 3,500 capítulos producidos de la radionovela “Chucho el Roto”. A partir de las siete de la tarde, durante media hora, los radioescuchas permanecían expectantes ante las voces de Manuel López Ochoa interpretando a “el Bandido Generoso” y Amparo Garrido como Matilde de Frizac para la adaptación de Carlos Chacón Jr.. A esta obra se le considera la última gran radionovela, no solo por la trama, también por su tiempo de transmisión en México y re-transmisiones a toda Latinoamérica.
  • En 1968 Carlos Chacón Jr. escribió la adaptación para la televisión llevando el papel de "Chucho el Roto" el actor Manuel López Ochoa; Blanca Sánchez representó a Matilde del Frizac; Susana Alexander, a Carolina del Frizac; María Eugenia Ríos dio vida a Lupe, la hermana de Jesús Arriaga; Luciano Hernández de la Vega, a Don Diego del Frizac; Alicia Montoya en el papel de la madre de Jesús Arriaga; y los tres secuaces de "Chucho el Roto" fueron: Arturo Benavides como Margarito López, "el Rorro"; Freddy Fernández como Juan Ramírez, "la Changa"; y Mario García González como Juan Palomo, "la Fiera". La producción corrió a cargo de Valentín Pimstein; y en la dirección de escena, Fernando Wagner.
  • Para el cine se realizaron tres adaptaciones y dos seriales, a saber, 1921: Producción y dirección de Xavier Frías Beltrán (película muda). 1934: Producción de la Compañía Cinematográfica Mexicana, S.A., dirección de Gabriel Soria, adaptación de Rafael Bermúdez Satarain y en el rol protagónico el actor Fernando Soler en su primera película rodada en México. 1954: Producción de Reforma Films, S.A., dirección de Miguel M. Delgado, adaptación de José Luis Bueno y en el papel titular el actor Luis Aguilar. 1960 a 1961: Primer serial, producción de los Estudios América, S.A., dirección de Manuel Muñoz bajo la pluma de Alfredo Ruanova y Carlos Enrique Taboada con Carlos Baena como “Chucho el Roto”. 1969 a 1971: Segundo serial, producción y dirección de Alfredo Zacarías, adaptación de Carlos Chacón Jr. con Manuel López Ochoa interpretando a “el pillo de Arriaga”.

Bibliografía[editar]

  • BELLO Pérez, Isaías. De Toci a Señora Santa Ana. Edit. Ciberya, Tlaxcala, 2006.
  • NAVA Rodríguez, Luis. Historia de Chiautempan. Talleres Gráficos del Gobierno del Estado de Tlaxcala, 1990.
  • NAVA, Marisol. Lenguas y Campanas: Relato Oral en Chiautempan. Departamento de Filosofía y Letras, Universidad Autónoma de Tlaxcala, 2001.
  • FLORES Meneses, Rogelio. La Lista del Dios. Los Hijos Queridos del Señor. Talleres Gráficos del Gobierno del Estado de Tlaxcala, 1995.

Enlaces externos[editar]